El hecho de... No implica que...

Somos humanos, aquellos que sienten, piensan y actúan, lamentablemente humanos que se han convertido en críticas, burlas y jueces. El mundo está al revés, al parecer lo malo es bueno y lo bueno es malo, amar al prójimo se ha vuelto tan complicado como dar tu opinión y que lo tomen como un problema en vez de una solución. Se han olvidado de lo esencial para establecer modas que no edifican, los libros hoy en día tienen más polvo que lectores, el estudiar parece innecesario aún cuando muchos carecen por falta de conocimiento.

Todos somos iguales ante Dios, pero hasta eso han malinterpretado, porque no hace acepción de personas, el amor es un lenguaje y la manera de amar es la acción que revela lo que guarda tu corazón, hoy podemos amanecer molestos y por la noche estar contentos, eso no define la esencia con la que fuimos creados, eso más bien habla del hálito que demuestra que estamos vivos y la vida continúa con altas y bajas sin renunciar. Seguimos sintiendo la pérdida de un familiar, de un amigo, de esa persona que de tan solo pensarlo corren lágrimas que nos hacen valorar más lo que tenemos en las manos y alrededor, celebramos éxitos ajenos como si fueran nuestros, saludamos a desconocidos con educación y abrazamos con cariño, de eso se trata, no dejar de ser humanos reales y la ficción que sea para el cine.

Con amor y respeto se crean muchas cosas, con gratitud se llega lejos, vive con propósito y nada será en vano.